¿Sabés cuánto influye la gestión de recursos humanos en los costos de tu empresa? ¿Y cuales son las consecuencias de sus costos de no calidad? Hablemos del impacto de una gestión ineficiente de los recursos humanos en los costos de tu empresa.
Hay muchas aristas desde las cuales es posible abordar esta temática. Desde SLC insistimos siempre en la importancia de entender al área de Recursos Humanos como estratégica en el éxito de la organización.
Así, entendemos que un punto clave que no debería pasarse por alto, además de los costos de contratación de empleados, es su incidencia en la marca empleadora (employer branding), lo que atraerá a los mejores candidatos a incorporar y será fundamental en la fidelización de los profesionales que ya forman parte de nuestros equipos, mejorando la productividad y evitando la alta rotación.
Hablemos de costos
Existen numerosos estudios que indican los altísimos costos que representa para una empresa una mala contratación. Algunos de ellos hablan de perder el doble del salario anual que se pagaba al empleado que se ha perdido. Estas pérdidas no son solo económicas: afectan directamente la reputación de la marca.
Pero hay más.
Se sabe que la mayoría de las personas, hoy en día, buscan a las empresas en los diferentes motores de búsqueda a disposición (según RecruitingDaily.com, ese ocmportamiento corresponde al 80% de las personas) y lo hacen como lo harían ante cualquier decisión de compra, por lo que la marca emprendedora vuelve a observarse como un factor clave y determinante.
Y hay otros dos datos, vinculados a la reputación de marca, que es interesante observar:
- el 69% de los candidatos afirmó que, aún encontrándose desempleados, no aceptarían incorporarse a una empresa que cuente con una mala reputación
- el 84% indicó que consideraría dejar su empleo actual para incorporarse a una empresa con mejor reputación de marca, aun si eso representa un aumento salarial inferior al 5%
Una mejor marca empleadora viene de la mano de solicitudes de empleo de mayor calidad en menos tiempo y por menos dinero, lo cual genera menores costos en los siempre largos procesos de reclutamiento. Esto, a su vez, evita cometer errores en la contratación, los cuales ocasionan mayores costos luego, logrando una gestión de calidad.
Costos de calidad y de no calidad
Los costos en la gestión de Recursos Humanos pueden identificarse como de calidad y de no calidad.
Si el área identifica y previene fallos y defectos, por ejemplo, en los procedimientos que se deben llevar a cabo en el proceso de selección para que este sea eficiente y exitoso, hablamos de costo de calidad.
Los costos de no calidad, por su parte, serán todas aquellas erogaciones que fueran evitables y se produjeran por ineficiencias de los procesos de la empresa. Probablemente el ejemplo más claro sea la alta rotación de empleados debido al error en el perfil de contratación.
Una mala contratación, incluso antes de generarse la rotación, ya nos está generando problemas: si los empleados contratados brindan un producto de mala calidad o lo hacen de un modo ineficiente, se produce un efecto en cadena que afecta a toda la organización: los costos de insatisfacción del cliente no son solo aquellos en los que debe incurrir al no satisfacerlo al 100% nuestro producto o servicio, también hablamos de las consecuencias a largo plazo, como la disminución de las ventas, mala imagen de la empresa y caída de su reputación.
Los costos concretos, según algunos estudios, de una mala calidad, representan entre el 5 y el 25% de las ventas anuales.
Y esto es un círculo vicioso, ya que se le suma el hecho de que le dificulta al área de Recursos Humanos lograr reclutar profesionales de calidad con una marca empleadora de mala reputación.
La tarea de Recursos Humanos, como vimos e insistimos, no es solo la de reclutar y contratar personal —siendo igualmente un factor evidentemente clave en sus funciones—, sino la de realizar acciones que generen beneficios perdurables para la empresa y sus equipos de profesionales, dentro de las cuales está también la de crear y sostener un clima laboral propicio.
¿Cuál es el impacto de una gestión ineficiente de los recursos humanos?
Muchas y graves, pero entre ellas las principales son:
Fuga de talentos.
Nos gusta pensar que hemos dejado atrás esa vieja idea de que lo único que persigue una empresa es maximizar sus ingresos. Lograr una sostenibilidad en los ingresos es clave, claro, pero no lo es menos el desafío que implica lograr que los mejores profesionales se sientan atraídos por nuestra empresa, se incorporen a ella y, sobre todo, permanezcan y la hagan crecer con su trabajo.
La incapacidad de una empresa de fidelizar a sus empleados redundará en la necesidad de inversión en los procesos de reclutamiento, en los incentivos y en la gestión integral de los recursos humanos que, evidentemente, está fallando.
Rotación de personal
No se puede hablar de un proceso de reclutamiento y selección exitoso si un empleado renuncia a la empresa dentro de los 6 meses de su incorporación. SI ese es el caso, estamos ante una falla en la gestión del capital humano. Una falla que genera un costo de los llamados “de no calidad” (nuevos procesos de reclutamiento, entrenamiento, inducción, tiempo, etc.)
Exceso de competitividad
Una buena gestión de recursos humanos debe incluir la posibilidad de que los colaboradores demuestren en qué áreas y realizando qué tarea pueden destacar. Pero tiene también que encargarse de un análisis y seguimiento de conductas, de modo de evitar los extremos. A modo de ejemplo, si un trabajador se obsesionara con alcanzar un logro, probablemente disminuiría su compañerismo y se produjera un clima laboral desagradable.
Además de lo indeseable en sí mismo, esta situación probablemente conduzca a la empresa a incurrir en nuevos costos de no calidad, como despido de personal, necesidad de inversión en el reclutamiento para cubrir las nuevas vacantes, e incluso en talleres y capacitaciones tendientes a fomentar el buen clima laboral entre los empleados.
Incertidumbre laboral
Una buena gestión de los recursos humanos debe incluir el desarrollo profesional. Debe ser claro para cada uno de los profesionales que conforman nuestros equipos cuáles son las oportunidades con las que cuentan, que posibilidades de crecimiento tienen, cuales son sus expectativas y aspiraciones que tengan correspondencia con la realidad.
Si, por el contrario, esto no existe o no resulta claro, se genera incertidumbre laboral que suele redundar en la frustración de los empleados, un bajo rendimiento individual y falta de compañerismo general, lo que probablemente incremente la rotación de personal, disminuya la reputación de marca y se incurra en nuevos costos de no calidad que deberían ser evitados por un área de Recursos Humanos eficiente.
Decimos e insistimos: contar con una gestión de los recursos humanos de tu empresa de excelencia, solo te brindará beneficios: a corto, mediano y largo plazo.
Será un placer acompañarte en ese camino con nuestro equipo de profesionales especializados.